Bronny James, el joven de 20 años y hijo del legendario LeBron James, está enfrentando uno de los desafíos más grandes de su carrera: su temporada de novato en la NBA. Aunque su pretemporada con los Lakers no ha sido la ideal, incluso él admite que le falta la confianza necesaria para triunfar en la liga. Sin embargo, el compromiso del equipo angelino con James es sólido, ya que cuenta con un contrato garantizado, lo que le brinda la oportunidad de demostrar su valía.
El reconocido entrenador de estrellas de la NBA, Chris Brickley, quien trabajó con Bronny durante el verano, ha destacado el deseo y la dedicación del joven. Brickley compartió cómo Bronny, tras no ser seleccionado en la primera ronda del draft, estuvo en el gimnasio a las 9 de la mañana del día siguiente, trabajando para mejorar su juego. Según el entrenador, la capacidad atlética de Bronny, su manejo del balón, su tiro y su inteligencia en la cancha están subestimados, y cree que tiene un futuro prometedor en la liga.
El camino para Bronny no será fácil. Como ocurre con todos los novatos, deberá adaptarse al ritmo vertiginoso de la NBA, aprender rápidamente los conceptos del equipo y ganarse la confianza de su entrenador. Según Brickley, esto será clave para que Bronny aproveche al máximo su tiempo en la cancha y comience a destacarse. Aunque el proceso será desafiante, la determinación del joven lo posiciona para tener una larga y exitosa carrera en el baloncesto profesional.