El sábado en el Echo Arena de Liverpool, Nick Ball defendió su título mundial de peso pluma de la WBA con una victoria por TKO en el décimo asalto contra Ronny Rios. Ball, invicto con un récord de 21-0-1 y 12 KO’s, derribó a Rios en el tercero, séptimo y décimo asaltos antes de que el equipo de Rios detuviera el combate. Durante la última caída, Rios cayó entre las cuerdas y terminó en el borde del ring, pero su esquina decidió que no continuara. Ball expresó su interés en un combate de revancha con Ray Vargas, de quien dijo: «Quiero esos cinturones; el de Vargas debería ser mío».
En otro emocionante combate, Janibek Alimkhanuly defendió su título de peso medio de la IBF con una victoria por TKO en el noveno asalto contra Andrei Mikhailovich, en un evento realizado el viernes en The Star Sydney, Australia. Alimkhanuly conectó dos ganchos de izquierda consecutivos que hicieron tambalearse a Mikhailovich, forzando al árbitro a detener la pelea. El campeón kazajo, ahora con un récord de 16-0 y 11 KO’s, expresó su deseo de unificar títulos contra otros campeones, mencionando a Carlos Adames y Erislandy Lara como posibles oponentes.
Estos resultados solidifican a Ball y Alimkhanuly como fuerzas a tener en cuenta en sus respectivas divisiones. Ball se mostró imparable en casa y Alimkhanuly, quien también sostiene el título de la WBO, demostró su dominio sobre un rival resistente. Ambos campeones buscan seguir expandiendo su legado con enfrentamientos de unificación en el horizonte, asegurando emocionantes desafíos futuros para los fanáticos del boxeo.
