Puerto Rico no se rinde. Y mucho menos cuando se trata de representar la bandera en alto. Esta vez, el protagonismo se lo lleva el golf, un deporte que, aunque no siempre acapara los titulares en la Isla, está escribiendo una nueva página de orgullo y determinación. Tres nombres, tres jóvenes con sangre caliente y visión de futuro: Alejandro Caraballo, Kelvin Hernández y Arabella López han clasificado oficialmente a los Juegos Panamericanos Júnior Asunción 2025.
Y no estamos hablando de simples participaciones. Estamos hablando de historia. Porque esta será la primera vez que el golf boricua dice “¡presente!” en esta justa continental juvenil. Una nueva etapa comienza para Puerto Rico, y estos tres talentos están abriendo camino en una disciplina que muchos aún subestiman, pero que estos chicos están decididos a poner en el mapa con orgullo boricua.
La voz del COPUR: “No es suerte, es trabajo”
La presidenta del Comité Olímpico de Puerto Rico (COPUR), Sara Rosario Vélez, no escondió su emoción. Con el temple de quien ha visto crecer generaciones de atletas, Rosario dejó claro que esta clasificación no es casualidad.
“Día a día la delegación aumenta, actualmente nuestro #EquipoPUR ya cuenta con 75 atletas clasificados”, soltó con una sonrisa que dejaba entrever la satisfacción del deber cumplido.
Pero más allá de los números, lo que verdaderamente resalta es el simbolismo de esta clasificación:
“El golf boricua debuta en estos Juegos y estoy muy segura de que la entrada de Alejandro, Kelvin y Arabella a Asunción 2025, es una muestra del talento y compromiso que estos jóvenes atletas tienen con su deporte y su federación. Hay una nueva cosecha que va por buen camino”.
Aquí en Deportes Online Network no nos tragamos el cuento de que el deporte es solo medallas. Sabemos que cada boleto a una competencia internacional significa sacrificios, entrenamientos bajo sol y lluvia, llorar en silencio cuando no salen los tiros, y volver al campo a seguir dándolo todo. Eso es lo que nos representa.
Arabella, Alejandro y Kelvin: nombres que hay que aprenderse
Arabella López, con apenas 17 años, ya tiene temple de veterana. La joven golfista ha demostrado una madurez que impresiona, no solo con sus golpes, sino con su disciplina y enfoque. Representó a Puerto Rico recientemente en el AJGA UHY Albany Junior en New York, uno de los torneos más prestigiosos del circuito juvenil de golf en Estados Unidos.
A su lado estuvo Alejandro Caraballo, otro joven fajón que no le teme a las grandes ligas. Con un swing firme y mentalidad ganadora, Alejandro también dejó huella en New York, demostrando que lo suyo no es un pasatiempo, sino una carrera en pleno desarrollo.
Y si hablamos de consistencia y proyección, hay que mencionar a Kelvin Hernández, quien actualmente cursa su segundo año universitario en la Universidad de Carolina del Norte en Greensboro. Kelvin viene de competir en el Puerto Rico Open 2025, celebrado en el Grand Reserve Golf Club en Río Grande. Un evento de alto calibre donde pudo medirse con jugadores profesionales y salir con la frente en alto. Este muchacho es una promesa real, y lo sabe.
La importancia de llegar a tiempo
Faltan menos de 30 días para que se cierre oficialmente el periodo de clasificación a los Juegos. Y aunque el golf ya selló su pase, hay otras disciplinas que siguen en carrera: gimnasia artística, natación, aguas abiertas, clavados, ciclismo (BMX, MTB y ruta), levantamiento de pesas y tenis de campo.
La carrera contra el reloj es real. Cada federación, cada entrenador y cada atleta está quemando los últimos cartuchos para asegurar su espacio. Pero mientras tanto, los del golf ya aseguraron su maleta. Y eso, mi gente, no se logra con suerte, se logra con trabajo.
El golf: ese deporte “fino” que también es boricua
En Puerto Rico, el golf muchas veces ha sido visto como un deporte de élites, de urbanizaciones cerradas y membresías inalcanzables. Pero historias como la de Arabella, Alejandro y Kelvin rompen con ese molde. Son jóvenes de aquí, con raíces humildes y aspiraciones grandes. No llegaron por apellidos ni por contactos. Llegaron por méritos, por horas interminables de práctica, y por el respaldo —aunque limitado— de una federación que sigue empujando para ganar visibilidad.
Y es que, seamos honestos, en una Isla donde el béisbol, el boxeo y el baloncesto se roban el show, hablar de golf parece una rareza. Pero esa mentalidad está cambiando. Poco a poco, más jóvenes se están interesando, más canchas se están abriendo, y más familias están viendo que el golf también puede ser una vía al éxito, a becas, a competencias internacionales y a carreras deportivas dignas.
Asunción 2025: más que una competencia, una plataforma
Los Juegos Panamericanos Júnior de Asunción se celebrarán del 9 al 23 de agosto en Paraguay, y reunirá a los mejores atletas juveniles del continente. Para muchos, será la antesala a una carrera olímpica. Para otros, el punto más alto de sus carreras deportivas. Pero para todos, será una experiencia que marcará su vida.
Puerto Rico, con su historia de punchline en los deportes, no llega como relleno. Llega como potencia emergente, con hambre de más. Y estos tres golfistas son el ejemplo perfecto de una nueva generación que no quiere pedir permiso. Quiere llegar, competir y ganar.
Opinión: Cuando el deporte se convierte en símbolo
Aquí en Deportes Online Network no creemos en la imparcialidad tibia. Creemos en contar las historias que merecen ser contadas. Creemos que cuando un joven boricua clasifica a una competencia internacional, no es solo un logro personal. Es una victoria colectiva. Porque en cada clasificación hay una madre que se desvive por llevar a su hijo a las prácticas, un entrenador que da la milla extra sin cobrar horas extra, y una comunidad que empuja desde lejos.
Alejandro, Kelvin y Arabella no solo van a jugar golf. Van a representar un país que muchas veces se cae, pero que siempre se levanta. Un país pequeño en tamaño, pero gigante en espíritu. Un país que, cuando uno de los suyos brilla, lo celebra como si fuera de todos. Porque lo es.
Conclusión: ¡Vamos pa’ encima!
Así que desde ya, pongamos los ojos en Asunción. Porque cuando estos tres muchachos se paren en el green, no estarán solos. Estarán cargando con ellos el peso de una Isla que los apoya, una diáspora que los sigue, y una prensa deportiva —como esta— que no solo informa, sino que se siente parte de la historia.
El golf boricua ya está en la jugada. Y con estos tres de frente, no hay excusas. Hay swing, hay talento y, sobre todo, hay patria.